“Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría.”(Salmos 90:12)
Si alguien le diera la suma de 87,000.00 dólares, ¿qué haría usted con ello? Hay probablemente muchas cosas que usted compraría y haría con ello. Pero, te dices, "nadie mi va a darme esa cantidad de dinero". Probablemente que no, pero si habrá algo dado a usted este año que el dinero no puede comprar, tiempo. Así es. En 2023, Dios dará a todos nosotros 87,000 horas o 5, 256,000 minutos para utilizar.
¿Cómo pasará usted este tiempo? Usted lo puede usarlo sabiamente, usarlo todo en usted mismo o dar parte de este tiempo a tu prójimo o a Dios en el servicio. Tal vez no seamos ricos en términos de dólares, pero una cosa que tendremos todos en común son las horas de 2023. ¿Cómo va pasará usted este tiempo? Recuerde, tendremos que dar todos cuenta a Dios en cuanto a lo que hicimos con el tiempo que él nos dio este año.
Contar es la primera cosa que se aprende en la vida y de las primeras que se ensenan al niño. Contar bien nuestros días es cosa que debemos procurar con empeño; pero pocos aprenden a hacerlo. De contar bien depende la vida y el destino.
Nuestros días son nuestro tesoro. Es la posesión de que depende todo. Sin embargo, se cuenta con más afán el dinero. Son pocos los días que Dios nos da por eso tenemos que usarlos sabiamente. No se pueden recobrar los días perdidos. El dinero se puede recobrar, pero los días jamás. Nuestro carácter, el éxito y nuestra eternidad dependen de su uso. Recordemos, que Dios nos va a pedir cuenta de ellos. ¿Cómo lo daremos se no la llevamos?
¿Cómo es como unos los cuentan? Unos los cuentan por números. Estos nos dicen si se aprovechan. Muchos días sin provecho nada valen. Otros los cuentan por los placeres. La vida es para gozarla pero si el placer es su único fin que perdida. Hay unos que los cuentan por cuantas riquezas acumulan. Unos los cuentan por sus aflicciones, pero de qué sirve sufrir si en esa escuela no aprendemos nada. La vida no consiste en que tanto duramos, sino en que es lo que hacemos con nuestros días. La vida verdadera no es aquella que se mide en términos de años sino de aprovechamientos.
¿Cómo es que Dios quiere que los contemos? El quiere que los contemos por las bendiciones que El nos da cada día. Muchos las olvidan o las menosprecian. El Señor quiere que aprovechemos las oportunidades de hacer bien y servirle. Algunos solo piensan en las oportunidades de enriquecerse o de gozarse. Dios también espera que los contemos por nuestro crecimiento espiritual.
Hay sabiduría que adquiere en contar los días de la
manera que Dios nos quiere. Uno aprende amar y servir. Aprende a no dejar que
se pierda su tiempo y aprovechar sus oportunidades. Pero sobre todo, aprende estar
siempre contento. ¡Que Dios nos enseñe a contar los como en Su presencia!
No comments:
Post a Comment