“Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a
los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.” (I
Pedro 4:10)
DONES DE SERVICIO (Motivacional)
El
descubrimiento de nuestro Don Espiritual, el desarrollo de ese Don y el
ejercicio de ese Don no es una opción, es una orden de Dios, y Él espera que
todos hagamos estas tres cosas. El propósito de los Dones Espirituales es para
habilitar al Cristino para participar más efectivamente en la implementación de
la comisión de Jesús de “Id, y hacer discípulos a todas las naciones” (Mat.
28:19).
Para que la Iglesia opere lo mejor
de su potencial total, cada miembro debe descubrir lo que lo motiva. La llave a
este descubrimiento yace en las palabras “interés” y “habilidad”. La
meta de Dios para Su Iglesia es que cada miembro se coloca en un ministerio
donde él esté interesado y donde yazcan sus habilidades. A colocar una persona
a funcionar donde ésta no tiene interés es como poner un “ojo” a funcionar como
“oído”. Cuando cada miembro de la Iglesia sirve de acuerdo como Dios lo ha dotado,
el resultado será un crecimiento natural del cuerpo (Efe. 4:16). Estos
dones hacen posible el “Ministerio del Cuerpo”.
COMPRENDIENDO LOS DONES ESPIRITUALES
“No quiero, hermanos, que ignoréis
acerca de los Dones Espirituales” (I Cor. 12:1). ¡Tal ignorancia no es en ninguna manera bendición! Ignorancia de los Dones
Espirituales es uno de las razones principales por el crecimiento retardado de
la iglesia. Está ignorancia esta también a la raíz del desánimo, inseguridad, frustración y
culpabilidad que oprime a muchos hermanos y escatima su eficacia total para
Dios.
Hay una diferencia entre un
Ministerio y un Don Motivacional. Un Ministerio es un área de servicio y un Don
Motivacional es ese empuje interior y capacidad que Dios le ha dado a cada
individuo sin excepción y sin mérito. Dios le dio este Don el momento que usted
fue salvo, no como un talento natural con que usted nace.
No confunden Dones Motivacionales
(Dones Espirituales) con talentos naturales. Tal como tocar un instrumento, cocinar,
pintar, cantar, etc. No confunden estos Dones con el Fruto del Espíritu. El
Fruto del Espíritu se desarrolla, el Don se descubre
El comprender los Dones Espirituales
es la llave para comprender la organización de la Iglesia. Ninguna Iglesia
local será lo que debe ser, lo que Jesús oró que debiera ser, lo que el
Espíritu Santo dotó y capacitó que fuera, hasta que comprenda los Dones Espirituales.
La Biblia declara en I Corintios
12:7-13 que la experiencia del nuevo nacimiento es lo que coloca a la persona
en el Cuerpo de Cristo y que el Espíritu Santo le da a cada miembro un don
único que lo califica para realizar una función específica en el Cuerpo. Las
palabras “cada uno” (I Cor.12:7,11; I Ped. 4:10; Rom. 12:3) y “todos” (I Cor.
12:13; Rom. 12:4-5,6) revelan que por la virtud del Nuevo Nacimiento, cada
miembro tiene a lo menos un don. Una versión de la Biblia parafrasea Efesios
4:7, “Sin embargo, él nos ha dado a cada uno de nosotros habilidades
especiales - lo que él quiera que nosotros tengamos de su rico almacén de
dones.” Eso indica que ningún miembro del Cuerpo de Cristo puede decir que
no está capacitado o que no puede hacer algo en la evangelización del mundo.
Cada miembro debe reconocer que los
Dones Espirituales no son producidos por el intelecto ni el talento natural.
Sino que son un producto de la Gracia de Dios (Rom. 12:6). Alguien puede decir;
“Pensé que gracia era un favor inmerecido de Dios.” Sí es. Pero más que eso,
gracia es el deseo y la habilidad dada por Dios para hacer Su voluntad. El
Apóstol Pablo revela que:
1. La gracia de Dios causó que él
trabajara (I Cor. 15:10).
2. No vivir para Cristo es frustrar
Su gracia (Gál. 2:20-21).
3. El fue ministro por la gracia de
Dios (Efe. 3:7).
4. Dios motivó en él el deseo de
hacer y le dio la habilidad de hacer (Filip. 2:13).
Gracia, entonces, es el motivador
divino que capacita a cada hijo de Dios para hacer Su voluntad, “...a buscar
y a salvar lo que se había perdido” (Lc. 19:10). El hombre, apartado de
Cristo, es incapaz de hacer algo bueno (Rom. 3:10-12).
Ya que Dios nos ha dado estos dones
gratuitamente, es evidente que El los dio para que nosotros los usáramos. “Cada
uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos
administradores de la multiforme gracia de Dios” (I Ped. 4:10). El Apóstol
Pedro hace dos puntos importantes aquí. Primero, cada uno ha recibido dones y
habilidades. En segundo lugar, cada uno debe utilizar sus dones ministrándolos.
Nadie está exento; todos deben envolverse. Todo el pueblo de Dios debe aparecer
ante el tribunal de Cristo para rendir cuentas de su mayordomía (Rom. 14:10-12;
Col. 4:17; Lucas 16:1-2).
Pablo desenlaza tres grupos de Dones
en el Cuerpo de Cristo que son los Dones de preparación (equipando), los Dones
Espirituales, y los Dones Serviciales.
1. Preparación (Púlpito y
Predicación) Efesios 4:11-13: Dios dio apóstoles, profetas, evangelistas,
pastores y maestros “a fin de perfeccionar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.” La tarea principal
de estos dones para la Iglesia es de capacitadores y preparadores.
2. Espirituales (Señales) I
Corintios 12:8-10: Dios dio los siguientes Dones supe naturales para el uso en
la adoración pública (y otros propósitos); palabra de sabiduría, palabra de
ciencia, fe, dones de sanidades, el hacer milagros, profecía, discernimiento de
espíritus, diversos géneros de lenguas, interpretación de lenguas.
3. Servicio (Motivacional) Romanos
12:6-8; I Corintios 12:28: Dios dio estos Dones para el servicio en el Cuerpo
de Cristo; enseñanza, liderazgo, profecía, exhortación (ánimo), misericordia,
servicio, dar, administración y ayudas.
UNAS RAZONES PORQUÉ ALGUNOS NO
PUEDEN DESCUBRIR SU DON
A. Puede haber conflictos no
resueltos en su vida por lo cual el asunto está siendo nublado y usted no oye
la voz de Dios porque las cosas no están bien entre Él y usted.
B. No está involucrado en algún tipo
de Ministerio o servicio por el cual su Don motivacional puede descubrirse.
C. Tratando de imitar el Don de otro
hermano. Esto lo confundirá.
D. El no analizar lo que usted hace
y la motivación detrás de ello.
E. Confundir el Ministerio con el
Don. El Ministerio es la actividad en que usted efectúa lo que Dios le ha llamado
hacer, motivado por un Don particular.
DESCUBRIENDO SUS DONES PARA
MINISTRAR EN EL CUERPO
El primer paso para descubrir su Don
no es por trabajarlo. Lo primero que tiene que hacer es aprender andar en el
Espíritu. Si usted no aprende andar y vivir en el Espíritu usted entonces va
ver y hacer todo en la carne. Y todo lo que hace lo va hacer por el esfuerzo
humano. Cuando estamos en el Espíritu todo los Dones trabajan juntos, pero
cuando estamos en la carne habrá conflicto y confusión como en la Iglesia en
Corinto. El secundo paso es preguntarse;
“¿Que es mi motivación por hacer esto, por sentirme de esta manera o por comportándome
en esta manera?” El tercer paso es que debes saber las características de
ese Don.
La manera para saber si Dios lo
quiere en cierta área de servicio es probar el área, “para que comprobéis
cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Rom. 12:2). El
secreto para encontrar la voluntad de Dios está envuelto en una palabra
“comprobar.” Esta palabra significa “probar, poner a prueba, con la
esperanza de aprobación.” Nosotros lo “probamos” o lo “comprobamos” al
tratarlo; con la esperanza de la aprobación ya en nuestra mente. Ponga a prueba
el don y vea cómo encaja. Busquemos las claves. Debemos estar conscientes de lo
siguiente:
1. ¿QUÉ VE USTED?
Salomón aconsejó, “Todo lo que te
viniere a la mano para hacer, hazlo” (Ecles. 9:10). Cristo dijo: “Alzad
vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega” (Jn.
4:35). ¿Qué es lo que ve usted? ¿Cuáles necesidades son obvias para usted? ¿Hay
necesidad de maestros de Estudios Bíblicos? ¿Quizás haya necesidad de
intercesores?
2. ¿QUÉ HACE USTED?
¿Tiene buenas habilidades de oficina? ¿Es usted un
buen maestro? ¿Tiene usted buenas habilidades de comunicación? Estas pueden ser
claves de cómo Dios quiera usarlo en Su ministerio de los dones.
3. ¿QUÉ DISFRUTA USTED?
¿Le gustan los niños? ¿Le encanta
hacer arreglos con flores? Usted puede cuidar los niños para que una madre esté
en una clase para nuevos convertidos o animar a un santo ausente con una
llamada
4. ¿QUÉ SIENTE USTED?
¿Cuál es su anhelo? Usted es bueno
en la manera de saber lo que Dios tiene para usted si puede mantener su anhelo
verdadero. No sea muy general en esta área.
5. ¿QUÉ ESCUCHA USTED?
A cualquiera que Dios ha llamado
verdaderamente a un área de servicio encontrará confirmación del cuerpo, la
iglesia de Dios. ¿Ha recibido usted un buen comentario en algo que ha intentado
hacer para Cristo?
TODOS DEBEN DESCUBRIR SU DON Y
USARLO:
Se ha encontrado que en la mayoría
de los negocios que el 20% de la gente hace el 80% del trabajo. Esto es también
verdad en la mayoría de las iglesias, 20% de los miembros hacen 80% del trabajo
y dan 80% del dinero.
Qué le diría a su hijo de 13 años se
él vendría a usted un día y le dijera, “Ya no voy a ir a la escuela, no voy
hacer nada. No quiero una vocación, no quiero una profesión, solamente voy a
vivir y pasármelo suave. Usted probablemente le diría a él, “Mira, tu Madre y
Yo ya hemos invertido mucho tiempo y dinero en ti para crearte.” Llega a los 18 años y viene a
usted con la misma cosa, no quiero hacer nada.
Usted probablemente le diría, “Mira, estas gastando tu vida, tu tiempo y
tus talentos. ¿Qué piensas que dios le
está diciendo se usted no está sirviendo? Dios quiere usarlo para que serba a
otros. ¿Por qué piensas que Dios lo ha bendecido?
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